La Comisión Europea ha coordinado este estudio cuya finalidad es proporcionar a los países participantes datos comparables sobre el dominio de lenguas extranjeras y un mayor conocimiento de lo que pueden considerarse "buenas prácticas" en el aprendizaje de idiomas. Quiere ser además un indicador que permita medir el progreso hacia la consecución de esos objetivos.
Este estudio se ha realizado a una muestra representativa de alumnos en el último curso de enseñanza secundaria, evaluando el inglés y el francés en España, al ser las dos lenguas europeas que más se enseñan. El informe internacional también aborda otros idiomas como el alemán, el italiano y el español.