Jonathan Temple, profesor de la Universidad de Bristol, resumió hace ya más de una década los estudios que analizaban el impacto de la educación en el crecimiento económico concluyendo que la formación de la población explica aproximadamente el 15% del crecimiento económico (Temple, 2001). Es más, el capital humano de la población de un país explica un tercio de las mejoras en la eficiencia: la posibilidad de producir bienes y servicios con menor empleo de recursos.